Pese a que la nochebuena y del día de la Navidad son fuertemente celebrados y populares en México, perdura en nuestras tradiciones y celebraciones un festejo con décadas de antigüedad, el Día de Reyes, que es casi igual de esperado como la llegada de Papá Noel con regalos y su flamante trineo rojo.
Desde tiempos de la colonización española, cada 6 de enero, en México se celebra el Día de los Reyes Magos, un día festivo de juegos y reuniones en familia donde todo es especial y los niños siguen creyendo en la magia y milagros de la navidad. La tradición ha perdurado en las familias mexicanas durante décadas y tanto los regalos como la gastronomía de este día es algo que todos disfrutamos y esperamos con ansia.
El origen de la Rosca de Reyes tuvo sus comienzos en países europeos como Francia y España y como es bien sabido, durante la conquista, esta costumbre llegó a México. El folclore y la iglesia católica indican que la “Epifanía” que es cuando los tres magos llevaron como ofrenda al Niño Dios oro, incienso y mirra, se representa o simboliza en el pan de la rosca y sus componentes simbolizan hechos similares a los que indica la iglesia cristiana.
Quienes exponen que la forma ovalada de la rosca simboliza el amor sin principio ni fin de Dios a sus hijos. Las frutas simbolizan el amor, paz y felicidad de las joyas obsequiadas por los reyes magos. Y el niño Jesús escondido en el interior de la rosca simboliza el acto de José y María escondiendo a su hijo. Y finalmente, a quien le toque el niño Dios en su pedazo de rosca, automáticamente se convierten en madrina o padrino del niño y deben festejar el acontecimiento con tamales y atole el 2 de febrero, Día de la Candelaria.
Si bien estas son las interpretaciones o tradiciones antiguas, es bien sabido que con el paso de los años, muchas personas y familias han adaptado u olvidado este verdadero significado o razón del festejo. Decidir si la tradición y el simbolismo religioso se debe de tomar en cuenta depende de cada persona y/o familia, pero hay que admitir que cualquier excusa para juntarse en familia y disfrutar en una rica cena y momentos de juego y diversión siempre serán muy bien recibidas.