Sí, sí es un término Chino. No, no es una religión o arte marcial o alguna ciudad asiática. Estés familiarizado o no con el tema, hoy podrás entender qué significa y porque debería considerarse esencial al momento de diseñar y decorar nuestros hogares. 

 

Al principio el Feng Shui era una pseudociencia que estudiaba los cambios del clima y la naturaleza y cómo estos afectaban la energía vital -Chi- de las personas. Conforme avanzó el tiempo, dicho término comenzó a utilizarse y aplicarse en otros medios y espacios de nuestras vidas, entre ellos la decoración de interiores. 

 

En resumen, con esta técnica se busca el equilibrio de la energía de una vivienda a través de la distribución, orientación y decoración de los espacios que usualmente utilizamos en nuestra vida cotidiana, como un dormitorio, cocina, sala de estar, e incluso oficinas, salas de junta y otros más. A continuación, recolectamos varios tips de los principios básicos del Feng Shui que te ayudarán a empezar a crear un entorno más armonioso para tus espacios:

 

  • Vestir las habitaciones, o sea decorarlas, pero cuidadosamente; la decoración y todo lo que rodea un espacio tiene que pensarse como un ser con energía que podría influir en la nuestra positiva o negativamente. Por ello, tener espacios limpios, ordenados y no tan abarrotados logra crear un efecto calmante y relajado. 

 

 

  • ¡Iluminación! Si bien, la luz natural siempre será mejor, es necesario cuidar los excesos de esta, tanto natural como artificial. Utilizar persianas, cortinas, lámparas de noche y diferentes temperaturas de luz para diferentes espacios, erradica la sobreestimulación del sentido visual y a su vez, lo promueve para despertar y activar la mente.

 

 

 

  • Los aromas, pueden crear un ambiente ideal para ponernos de buen humor, relajarnos, transportarnos a lugares placenteros y sentimentales, pero pueden hacer todo lo contrario si es un aroma que nos desagrada. Los aceites esenciales y las velas están muy de moda hoy en día ¡Aprovechalos!

 

 

 

  • Elementos naturales, madera, metal, agua, plantas, fuego, tierra, etc. Tener elementos que nos recuerden la naturaleza logra generar un equilibrio y balance dentro de nuestros espacios e invita a conectarse con ellos para no sentirse encerrados en un cuadro de cemento. 

 

 

Si bien entendemos que las opiniones respecto al tema pueden ser polarizadas ya que esta técnica no tiene estudios que comprueben sus beneficios, hay que reconocer que no está de más procurar tener, para nuestro propio beneficio un espacio en el que nos sintamos agusto y relajados, sea o no, aplicado al Feng Shui. 

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